Aquí ando, en mi empeño por cocinar un pan sin gluten que realmente me conquiste y con el que poder disfrutar a tope, así que, mientras, me preparo mis crackers caseras para matar el gusanillo. Las llamé «tipo regañás» porque me recuerdan muchísimo a las regañás o regañadas típicas de Sevilla. Son una especie de tortas de pan finas y crujientes que recuerdan en su sabor a los picos de pan. Hace unos años no había escuchado hablar de ellas y desde que vivo en Cádiz, las descubrí y llevo un tiempo buscando una alternativa saludable. Pues ya la tengo!
Esta receta parte de la idea de Rocío, la artista de la preciosa página Veggie Boogie, que, por cierto, me encanta!. Yo he cambiado ligeramente las cantidades para que me quedasen con la textura que buscaba: bien finitas y muy crujientes!
Están deliciosas así, sin más, para tomar entre horas como snack o acompañando tus comidas, pero también las puedes combinar poniéndoles algo dulce (nutella o mermelada caseras) o salado (algún paté vegetal, hummus o un queso untable).
Son fáciles y rápidos de preparar y puedes hacer cantidad porque se conservan muy bien!
Gracias, Rocío, por inspirarme y motivarme con tus fotos y tu cuenta!
INGREDIENTES:
🌱 1 taza de harina (yo usé 1/2 de trigo sarraceno y 1/2 de garbanzos, pero puedes usar la que tú quieras).
🌱 1 taza de agua
🌱 1 taza y media de mezcla de semillas (yo usé 1/2 taza de pipas de calabaza, 1/2 taza de semillas de girasol, 1/4 de semillas de sésamo y 1/4 de semillas de lino, pero aquí también tú eres quién elige las semillas que vas a usar)).
🌱 35 ml aceite de oliva virgen extra.
🌱 1 pizca de sal
PREPARACIÓN:
- Pon en un bol todos los ingredientes y mézclalos bien.
2. Enciende el horno a 180° con calor arriba y abajo y deja que mientras repose la mezcla unos 15 min.
3. En la bandeja del horno, pon papel de hornear y extiende bien la mezcla con una espátula, que quede finita.
4. Mete en el horno y saca de nuevo a los 10 minutos para dibujar líneas de corte sobre la masa con un cuchillo, así te será mucho más fácil cortar después los crackers.
5. Mete de nuevo en el horno otros 15 minutos o hasta que veas que está dorado.
6. Retira de la bandeja y pon a enfriar en una rejilla.
7. Una vez frío, córtalos y guarda en un recipiente bien cerrado, verás como crujen!
Ya ves, facilísimo: mezclar, dejar reposar, estirar y al horno!
Luego guárdalas bien, como te indico al final de la receta y tu esfuerzo será simplemente abrir el bote y a disfrutar. Están buenísimas y combinan genial con:
Gracias por todas tus recetas. Los crackers están por salir del horno y yo con unas ansias, porque el humus de garbanzo quedó riquísimo. Receta que he probado, receta que ha sido muy rica. Y lo mejor, ¡fáciles!
Mil gracias por tus palabras tan bonitas, Patricia! Qué ilusión que hayas hecho ya varias recetitas, que te hayan gustado y, sobre todo, que lo compartas conmigo. Todo el trabajo de publicar las recetas se ve recompensado con comentarios como el tuyo. Gracias!
acabo de hacerlas y quedaron riquísimas. El problema que tuve es que les quedó pegado el papel y no las pude despegar. Tienen alguna idea de lo que sucedió?
Gracias por las recetas!
Hola, Laura. La verdad es que a mí no me pasa, quizás que no estuviesen del todo cocinadas, quizás que el papel vegetal no es el indicado. La próxima vez, pinta con unas gotitas de aceite y extiéndelas, ya verás como no te vuelve a ocurrir. Gracias por animarte con esta delicia