Otra receta fácil, rápida, sana y deliciosa! Trufas de chocolate veganas!
Hay cientos de recetas de trufas, energy balls o bolas energéticas, como prefieras llamarlas, que circulan por la red, pero, después de haber probado unas cuantas, tengo que decir que estas trufas de chocolate veganas son, sin dudarlo, mis favoritas!
Me encanta la combinación del cacao con los frutos secos y si lleva un toque dulce ya es mi perdición.
Son un bocado goloso genial porque lo puedo llevar conmigo siempre que salgo de casa en el día a día o cuando nos vamos de viaje y la receta es muy sencilla.
Gracias a ellas evito tentaciones y antojos. Además, tardas media hora en tenerlas listas y todo recogido, pero luego te duran un par de semanas en un recipiente hermético.
INGREDIENTES:
- 1 taza de dátiles sin hueso
- 1/2 taza de avellanas tostadas
- 4 cucharadas de mantequilla de cacahuete, avellana u otro fruto seco. Si no te gustan estas mantequillas de frutos secos, o no tienes en casa, puedes reducir la cantidad de dátiles y sustituir la mantequilla por miel, para que haga de aglutinante y ayude a que se puedan formar las bolas. También puedes hacer tu propia mantequilla de frutos secos.
- 3 Cucharadas de cacao puro
- 1 pizca de sal
PREPARACIÓN:
- Pon los dátiles y las avellanas en el robot de cocina y tritura hasta que quede a trocitos pequeños, pero sin hacer una pasta. A mí me gustan mucho más así, para encontrarme los trocitos de frutos secos y que tengan un toque crocante, pero, si lo prefieres, puedes triturarlo hasta que quede una pasta.
- Añade el cacao, la mantequilla de fruto seco que hayas elegido y la sal y sigue triturando hasta obtener una mezcla homogénea.
- Pasa la mezcla a un bol. Estará suelta, pero al ponerla en la palma de la mano e ir apretando con los dedos se compacta y se une. Dale forma de bola.
4. Ya puedes dejarlas así tal cual y pasar al punto 5 directamente, o bien rebozarlas con lo que más te guste. Yo les puse 4 cosas diferentes: unas con canela y otras con cacao, que seguro que tienes en casa y también, «cosas raras», como dicen mis amigos: maca y harina de mezquite. Puse cada uno de los polvos con los que iba a rebozarlas en un cuenco pequeñito e iba metiendo las bolas de una en una, dándole vueltas. Un truco que también está bien es echar la harina o los polvos en una bolsa (las de plástico para congelar, que tienen cierre, son perfectas) y meter las trufas dentro. Mueves un poco la bolsa cerrada, la abres y ya tienes las trufas rebozadas.
5. Mételas en un recipiente hermético y, si hace calor, a la nevera.
Consejos:
Se me olvidaba decirte que no sólo las puedes rebozar con alimentos en polvo, también están muy ricas, por ejemplo, con algún fruto seco picado, como nueces, pistachos, avellanas…
Esta receta está genial para evitar comprar bollería y productos procesados. Llevas un par de trufas contigo y te las tomas cuando te entren esas ganas de dulce, y si las acompañas de un plátano, por ejemplo, pues ya tienes la merienda perfecta.
A los niños les encantan y doy fe, no lo digo con la boca pequeña. estuvieron presentes en varios cumples y tuvieron tanto éxito que los padres de los peques me pidieron la receta y ahora se las llevan al cole para comerlas, de vez en cuando, en el recreo, así que ya tenéis otra idea de merienda saludable ;).
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